La autora polaca Bozena Helena Mazur-Nowak, en su antología poética, nos revela que, a pesar de la partida de los seres queridos, el desamparo de la patria, la crueldad y la hipocresía manifiestas en la sociedad, y el amor no correspondido, podemos seguir adelante mientras tengamos la capacidad de contemplar el bello paisaje, atesoremos la gracia de estar vivos, creamos en un mundo mejor más allá de los sueños... Y que la voz de los desplazados, no por ser desplazada se deja de escuchar. Aquí canta el vertiginoso latido de un corazón que se ofrece al mundo, aunque le tema.